El estudio de la OMM recalca que hubo grandes inundaciones que afectaron a millones de personas en África Oriental y el Sahel, Asia Meridional, China y Vietnam. Kenia y Sudán fueron los más afectados de África con 285 y 155 muertes respectivamente. El lago Victoria alcanzó niveles récord en Niamey (Niger) y Jartum (Sudán) generando un peligroso brote de langostas.
En el sur de Asia, la India experimentó una de las dos temporadas de monzones más húmedas desde 1994, agosto fue el mes más húmedo en Pakistán y se observaron inundaciones en toda la región, incluidos Bangladesh, Nepal y Myanmar.
En China las fuertes lluvias en la cuenca del río Yangtsé causaron grandes inundaciones y las pérdidas económicas fueron de más de 15,000 mdd con 279 muertes reportadas.
En Vietnam las fuertes lluvias de la llegada del monzón del noreste se vieron exacerbadas por una serie de ciclones tropicales y depresiones, ocho de las cuáles tocaron tierra en menos de cinco semanas.