México país de un solo hombre

 


Sufrir por la libertad…es marchar por un sendero de abrojos que sólo se convierten en rosas cuando uno ha pasado.

Ignacio Manuel Altamirano

El título de este capítulo es “sexista”, porque es parte de nuestra realidad, ser discriminadores embozados del género femenino. Ser mujer en México es  formar parte de uno de los segmenetos mas desprotegidos de nuestra sociedad, a pesar de que las cosas  están  cambiado. Daré algunos numeros para reforzar lo dicho. México está entre los países que vis. a vis.  en términos de estadísticas  poblacionales tiene el mayor número  de embarazo en adolescentes (más de un millón, séptimo lugar a nivel mundial y primero de los países de la OCDE), ser parte del mayor número de mujeres indígenas analfabetas  767,000,  ser parte del mayor número de mujeres víctimas de violencia intrafamiliar (l de cada 3), junto con Brasil, estar entre  el mayor número de mujeres pobres que son presa de depredadores sexuales, siendo más del 94% víctimas de acoso en el medio laboral. En México tenemos una gran mayoría  de mujeres con poca representación en los Gabinetes de Estado, en ambas cámaras y la más subrepresentada en los  Consejos de Administración de las empresas. ( En 1999 sólo una mujer tenia asiento como consejera de una empresa del mercado Bursatil, María Asunción Aramburuzabala, en la cervecería Modelo). Esto afortunadamente ha cambiado y hoy 37 de un total  de 137 (28.7%) de las  emisoras bursátiles listadas en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), tienen cuando menos un asiento las mujeres (Reforma, Noviembre 7). A mayor abundamiento nos dice  la politóloga  Denise Dresser  (Conferencia Tec de Monterrey  Noviembre 6 , 2012) “En México se mujer y trabajar en una maquiladora significa estar en peligro de muerte, ser mujer implica el 30%  de probabilidad de tener un hijo antes de los 20 años; en México ser mujer todavia entraña lucha por serlo”.

Por otra parte, según Octavio Paz, el arquetipo paterno se manifiesta con diferentes patrones tanto en un aspecto positivo como negativo cuyo ideal  aun en el positivo del pueblo Azteca, se configura como inexistente y se asocia  siempre con la sensación de fracaso concluyendo que: “El Abatimiento de su Padre positivo lo hace un huérfano,  (Cuahutémoc)  o el escarnezco de su padre negativo lo renden  un bastardo (Hernán Cortéz)”  ambos  condenan  al mexicano a la orfandad que es la soledad misma en estado  de indefención.

Cuando analizamos nuestra historia nos damos cuenta que por medio milenio hemos tenido un reducido número de “pater familias” autoritarios que se han repartido como botín nuestros recursos petroleros, minería, concesiones de telecomunicaciones, bancos, enormes extensiones de tierra y los puestos públicos tanto sindicales, como legislativos, judiciales y ejecutivos sin el menor recato de cumplir o hacer cumplir la ley, antes o después de haberse empoderado de esos recursos, causa de lo que el mismo Paz llamó Patrimonialismo. Cuando González Pedrero, publicó su libro sobre Santa Ana, lo subtituló “México País de un Solo Hombre”. En realidad esto es lo que ha ocurrido desde la colonia. La pregunta obligada es ¿por qué lo hemos permitido,  por qué dejamos que nos sigan abusando? Las respuestas son muchas y variadas pero en el centro de ellas están dos actitudes muy mexicanas: Por temor y por pereza que ambas son destino en nuestro pueblo sistematicamente victimizado y en estado de omision perene. El temor es porque el garrote ha estado ahí cuando salimos a protestar (Tlalteloco, Jueves de Corpus, Atenco etc.), la pereza porque nos han enseñado en la familia, la escuela, la fábrica o la Universidad que lo mejor es hacerse tonto o como reza el dicho, “Si quieres vivir días felices, haste pendejo y no analices”. Un Neurocirujano compañero de entrenamiento en Zurich (1972), veracruzano como mi padre, una tarde que nos habíamos reunido con un grupo de amigos de la misma especialidad; un italiano (de apellido del Vivo) un Japones (Yonekawa) un persa con apellido y nombre iguales (Husein) y un Canadiense (Murray), nos pusimos a filosofar y como siempre me han interesado los atisbos a otras culturas les pregunté, que cual era la frase predilecta de sus Padres que hubiera sido crucial para su formación. El colega de Veracruz nos dijo una, que tardé varios minutos en explicarla y al final, al no poder transmitir su significado real, por lo contraintuitivo que parecía, terminé diciéndoles que era una broma Mexicana (todos los neurocirujanos eran académicos universitarios y veían con seriedad cualquier comunicación). Mi connacional nos dijo que su padre le había dicho que para triunfar en la vida el debería (su padre tenía dos barcos de pesca), no desapendejarse, es decir mantenerse pendejo, para que los demás no lo vieran como una amenaza, nadar de muertito en otras palabras, no hacer olas no protestar, no sacar la bandera de listo (lo cual lo era) y que eso era en México el único camino seguro al éxito y que lo podría llevar hasta ser presidente de la República, si no habías heredado poder o dinero.

Es por eso que Denise Dresser en su reciente libro “El País de Uno” nos dice: “que ahora que estamos ejerciendo nuestros derechos en esta democracia incipiente y exigimos “que el rasero regulatorio sea parejo” que se utilice la misma vara de medición, y concluye con respecto a la evaluación de la Cofeco, que ese esfuerzo que se está haciendo en favor de la competencia, sería como siempre una simulación, para ser derrotado en ese caso en particular, por el senor Slim Helu, que hará lo que sabe hacer mejor, “matar al mensajero” y con su ejército de abogados obtener amparos como “flayers” y frenar el fallo judicial, hasta que Felipe Calderón termine este sexenio para negociar con el siguiente presidente y la supuesta multa de mil millones de dólares por prácticas monopólicas, devanecerla con la burla pentagruélica, que un equivalente similar a esa cantidad se otorgará en beneficio de los usuarios de TELMEX. Porque, como dice tambien con respecto a las negociaciones entre el Secretario de Educación y “La Maestra”, lo que faltan en México son cojones. Por supuesto que si, aqui Felipe no es William Jefferson Clinton que retó a Microsoft, una de las empresas más ponderosas del mundo y con la ley antimonopolio en la mano la partió en dos. Ni tampoco es Putin que blindó a Gazprom, la paraestatal que comercializa gas natural, de intervenciones maliciosas de la Union Europea y sentenció, in absencia, a seis años de cárcel (2007) al epítome del “capitalismo de robo”, el Berlusconi de la media rusa Boris Berezovski, aqui Felipe Calderón es como el mismo se definió el 7 de noviembre en su frase de despedida “ha sido un honor servir a México con todos mis errores y limitaciones” los cuales fueron muchos los primeros y catastróficas las segundas.

Es por eso que la apatía revestida de pereza y el temor camuflajeado como una imposibilidad de acción, no nos permite rescatar al país de ese otro cartel el de empresarios que practican “racktering” y se ponen de acuerdo para anular la competencia, como las cementeras (Cemex, Lafarge y Holstein) o las cereveceras ( la ex- Mexicana Modelo comprada recientemente por AB inBev y la otrora Femsa ahora de Heineken), el duopolio televisivo (Televisa y Azteca) y finalmente la super poderosa Telmex cuyo dueño no sólo maneja la Bolsa Mexicana de Valores (de acuerdo con el presidente de la BMV que antecedio a Luis Tellez Kuenzler, quien dijo “of the record ” a los mexicanos alumnos en Harvard, entre ellos mi hijo, que Slim era el dueño, directa o indirectamente, del 53% de las acciones de la misma -año 2006-), y ademas del 8% del PIB Nacional. Una majadería del capitalismo salvaje, habida cuenta, que si lo comparamos con la proporcion del PIB de los Estados Unidos que Rockefeller manejaba en los años treinta (en su mejor época), este era un ridiculo 2.9% y su participacion en la bolsa menor del 5%.

Carlos Slim esta muy consciente de su enorme poder tanto en la arena política como económica no sólo en Mexico sino allende nuestras fronteras por eso pontifica desde el podium que siempre le ofrece la media mas aun ahora que es dueno del 10% del New York Times. Se dice que el presidente del grupo Carso es de hablar sereno y tiende a ser cortéz, aunque de esto último hay anécdotas contradictorias, y se habla que aun con sus “pares” ya sean hombres o mujeres puede mostrar faltas en cuanto a gracia social se refiere. Una anécdota es que en la última ocasión que invitó a su yate a la reina Noor de Jordania viuda del Rey Hussein, como el señor Slim no habla francés y su inglés carece de la fluidez que poseen los modernos mavericks, se cansó y la ignoró, sin hacer un esfuerzo para comunicarse con ella, lo cual ocasionó que la reina se sintiera a disgusto y terminara su romance con el magnate mexicano. Se dice también que al final de una conversación con Denise Dresser en su oficina, se sintió molesto pues no encontró eco en su reclamo que le hizo a la valiente escritora y profesora del Colegio de México cuando le pregunto ¿por qué me atacas tanto Denise?.

Se sabe que gusta de platicar con talentos a quienes invita a México para hablar de tópicos tan variopintos como el beisbol con Clinton o de política con la socialista Cristina Kirchner, particularmente cuando deseaba comprar más acciones a través de America Movil de la telefónica Argentina, sin embargo la mandataria Argentina fue presionada por Brasil y Colombia que ven con recelo la hegemonía económica que trata de ejercer en el cono sur. De igual manera es frecuentado por Felipe Gonzáles y Henry Kissinger y mantiene estrechas relaciones con intelectuales afamados de Latinoamerica como Carlos Fuentes y Gabriel García Márquez con quienes se dice hay un pacto tacito para evitar temas controversiales particularmente de política pública. Así mismo hay talentos que son sus amigos y los ha beneficiado creando centros de estudio para mejorar la contaminacion del D.F., entre otros a nuestro Nobel de Química Mario Molina Pasquel. Por otra parte con Bill Gates no le “entro el peine” para ser seducido y que aportara cantidades importantes a la obra “filantrópica” de la fundación Bill y Melinda Gates, que si obtuvieron la mayor parte de la fortuna del Canadiense Warren Buffet que durante 10 años ha estado en el segundo y tercer lugar como el hombre más rico del mundo de acuerdo con la revista Forbes.

El senor Slim lo ha declarado en muchas ocasiones que el no favorece las grandes donaciones filantrópicas, que él sólo cree en generar empleos, una falla consustancial en su eje de pensamiento, que lo aleja de la norma de cooperación omnipresente en cualquier individuo educado de cualquier latitud del planeta (ver el libro de Martin Nowak Supercooperadores), pues es ampliamente reconocido que las grandes donaciones filantrópicas (cuando son reales) no sólo contribuyen a la redistribución del ingreso y pueden ser un dique en contra de la inestabilidad social (Stiglitz 2012), sino ademas ayudan al estado siempre escaso de recursos a generar redes de protección social para los más desfavorecidos, particularmente en países con el llamado bono demográfico como México.

Tres cualidades son conocidas y admiradas de Slim, su amor a la familia, hijos, nietos y particularmente a su esposa Soumaya a quien inmortalizó con el museo que lleva su nombre, una exposición permanente de esculturas y pinturas mexicanas de los siglos XVIII, XIX y parte del XX, cuyo costo fue superior a los 300 millones de dólares y para quien se dice adquirió la mayor cantidad de esculturas de Rodin que hay en una coleccion privada. Su museografía está a veces en “default”, como cuando ubica las sandías de Tamayo cerca de otras sandías pintadas en el siglo XIX, de hecho la crítica de arte Raquel Tibol le ofreció ayuda gratuita para el museo, pero hasta donde yo se la rechazó. Este tipo de amor a la esposa tiene culturalmente más rasgos libaneses (árabes) que mexicanos pues he conocido a prominentes hombres de negocios árabes que profesan casi una monogamia exclusiva durante sus años de matrimonio. Su otra cualidad es la proverbial austeridad en su vida personal. Un conocido mío, quien laboró con él muchos años durante su ascenso, en una cacería nos contó, que como recibe una enorme catidad de correspondencia dirigida a él en lo personal, utiliza el reverso del sobre que queda en blanco, para escribir cortos pero sustanciosos memorandums a sus colaboradores cercanos y no tan cercanos, como fue el caso de una sobrina que trabajó en el museo y recibió una pequeña nota de su puño y letra, con una compensación de 30,000 pesos, después que regresara de Perú donde supervisó desde el embalaje y colgado de los cuadros hasta la temperatura ambiente de los recintos de exposición de su obra de arte. De aquí se desprende la tercera cualidad del magnate hijo de libaneses quienes llegaran hace más de 100 años a Veracruz sin hablar español, que es su capacidad magnánima para recompensar a sus colaboradores eficientes.

Es conocido que cuando pierde los estribos porque algo que no le favorece puede insultar, humillar y hacer uso de un lenguaje más afin a un carretonero de la merced que a un profesionista superprominente. Por otra parte se dice que cuando quiere es un verdadero “Charmer” un hombre que seduce sin avasallar como lo hacen la mayoria de los hombres de poder.

Los setenta y cinco mil millones de dolares que posee son cifras que le dan casi el título de propiedad de la nación Mexicana, luego entonces no se que otro argumento pueda yo invocar para afirmar que en lo material somos casi una propiedad de Carlos Slim Helu y que nuestra democracia es una farsa y México a 200 años después de la independencia, sigue siendo país de un solo hombre, quien seguirá manejándonos a través de nuestros políticos venales, como el titiritero maneja sus muñecos. Pero más horrorizante son los millones que gana cada minuto del día y que representarían, según diversos cálculos, más de veinte millones de veces de diferencia contra el ingreso de una empleada de las 193 tiendas Sanborns que posee, a quienes además se dice les retiene el 7% de la propina, para pagar el complemento del sueldo de las cocineras de cada una de esas cafeterías. Otro hecho más grave, es la proporción que representa no sólo su “net income” (ingreso) en relación con el resto de los mexicanos habida cuenta que este es transitorio y puede variar año con año, sino la proporción del total de su fortuna que desde que agregó al grupo Carso sus nuevas (hace de eso 20 años) empresas producto de licitaciones dudosas con el villano favorito, Telmex y Telcel, es astronómica y superior a la que poseen los 65 millones de mexicanos que están en la base de la piramide y cuyo valor no es transitorio.

Y que decir de la anulación de la competencia a través del “secuestro” de las conexiones que enlazan a 20 mil comunidades en el país, con la fibra óptica de Telmex y que está obligado a ofrecerla a aprecios razonables a sus competidores. Podríamos decir, sin temor a equivocarnos, que Slim Helu es el factor más poderoso que esta detrás del alto nivel de desigualdad en México y como lo ha repetido muchas veces el Profesor Joseph E. Stiglitz particularmente en sus libro más reciente (The Price of Inequalility 2012) esta “desigualdad aumenta la inestabilidad (social), reduce la productividad y socaba la democracia” la cual agrega el Nobel de Economía, se origina en la habilidad de ejercer el poder del mercado (en forma direccionadamente monopólica) que al final del día “incrementa la explotación de los consumidores a través del monopolio del poder o de la explotación de los más pobres y faltos de educación…con prácticas que aunque no son ilegales deberían serlo”.

Seguramente si Adam Smith viviera en nuestra época, se daría cuenta que su mano invisible del mercado es otra utopia fallida, como la de sociedad sin clases, y que si Marx reviviera y se enterara que Vladimir Putin y el primer Ministro Chino Wen Jiabao son dueños de cientos y quizá miles de millones de dólares, fallecería de nuevo probablemente de un masivo infarto cerebral.

Seria demasiado largo y requeriría un libro especial de un gran número de páginas para hablar de todos los negocios que posee tanto en México como en otros paises (29) el “ingeniero”, como también se le conoce al señor Slim Helu, además para cuando se publicara ese libro ya el dueño del grupo Carso habría adquirido además del 16% adicional de la Telekom Austria AG que compró hace pocas semanas (25 de Septiembre 2012) y que incluyen ser el líder de las telecomunicaciones en países como Bulgaria, Bielorusia, Croacia, Eslovenia, Liechstentein, Macedonia y Serbia. Es cierto que Slim Helu sólo en México dá trabajo a más de 200 mil gentes, pero también es ciero que, según cálculos recientes del gobierno norteamericano, el Chapo Guzmán dá empleo a cerca de 700 mil sicarios y tiene en nóminas a más de 15 mil policías de las diferentes dependencias y corporaciones, así que eso no lo hace ni benefactor, ni patriota, sino más bien ejemplo emblemático del “Cronny Capitalism” o el capitalismo de cuates tropicalizado a México. Lo más triste es que en encuesta reciente el 80% de los mexicanos dijeron que si sabian que Slim Helu era un monopolisita (sinónimo de explotador), pero que era “nuestro” monopolista y de no ser él lo sería un pinche gringo. Es esta miopía cerebral y disfuncional del mexicano que no sólo lo lleva a padecer el síndrome de Estocolmo (enamorarse del que lo victimiza), sino además aceptar su condición de víctima, y preferir seguir nadando de muertito para no hacer olas y si llegara el día que la revolución le hiciera justicia, poder salir en la foto (frase famosa del sempiterno líder de la CTM Fidel Velzáquez “el que se mueve no sale en la foto). Si este argumento, no muestra flagrantemente nuestro complejo de inferioridad, entonces no se qué otra forma de argumentación lógica pueda yo utilizar para demostrar que no solo tenemos el complejo de inferioridad sino que en nuestro yo sintiente y percipiente nos hace creernos inferiores.

Esta minusvalía del mexicano le da el potencial para hacer lo que mejor sabemos hacer, ser cortesanos, ser agachones y aceptar nuestro destino que puede llevarnos de la abyección hasta la muerte, con una resignación digna de un Job. ¿Para que entonces desapendejarnos?, si esta conducta ha sido validada durante quinientos años para sobrevivir en el cruel país del cactus como llamo Malcolm Lowry en su libro “Under the Volcano” a nuestro México lindo y querido.

México ha sido desde antes de ser nación, país de Tlatloanis (Tlahtoani) elegidos por una camarilla o pandilla o mafia de nobles o “pipitlin” en nahuatl y seguirá siéndolo, porque nuestro ego pusilánime y pequeño se enquistó y nos condenó, como diria Jorge Luis Borges, a una prolongada infancia, por eso admiramos a Chabelo y los cuentos chinos, por que se acomodan a nuestra psique infantil con justeza.

México seguirá siendo país de un solo hombre porque a los demás nos castraron y nos falta lo que nos dice Denise Dresser, con toda propiedad, cojones. Gaspar Melchor de Jovellanos, jurista y político español, ha dicho que “los pueblos tienen los gobiernos que se merecen” pero nuestro humor negro replica dentro de nuestras cabezas, no es cierto, no es cierto, no es cierto, si así fuera ya habríamos desaparecido como nación hace más de cien años.

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