Estos estados alterados de conciencia introspectiva pero excitados en el exterior son una característica de la Masonería iniciática. Empiezan con un estado de confusión del acólito y con el paso del tiempo y de la meditación conducen a un proceso de crecimiento intelectual y ético que es muy enriquecedor.
Hay que estar consciente de los peligros propios de una sociedad secreta muy poderosa que existe en los círculos interiores de los grandes dignatarios del Estado, la milicia, la política, la universidad o los poderes judiciales.
La masonería es una sociedad secreta y hermética, incluso para sus adeptos que avanzan de círculo a círculo sin saber lo que hay más allá de su conocimiento.
En España, la situación de la masonería tiene como protagonista estelar a PSOE de modo que la extrema corrupción que hay en ese Partido afecta a la misma Masonería, en cuyos grados más elevados se integran sus principales dirigentes.