El Nuevo Orden Mundial en 2014

 El Presidente de China Xi Jinping y el Primer Ministro de India Narendra Modi

 

Aun cuando un nuevo orden mundial fue ideado en Occidente por los grandes bancos del mundo en el 2011, para establecer una élite y un gobierno mundial totalitario, se requería, tanto de la creación de un nuevo ‘orden económico internacional’, como de un nuevo ‘orden político’. Asimismo se necesitaban nuevas instituciones y procedimientos a escala global. El ‘Nuevo Orden Mundial’ (NOM) estaba creado para establecer una sola economía, un solo sistema monetario e inclusive una sola religión. Estaba fundamentado en las relaciones económicas, financieras y comerciales globales teniendo como doctrina básica el neoliberalismo, por lo que proponía suprimir todo tipo de barreras al comercio y al mercado en la economía y a todas las que involucraran al Estado-nación en las relaciones globales.

Esto se proyectó cuando se pensaba que la gran crisis económica iniciada en el 2007 ya había terminado y el mundo estaba listo para ajustar todas sus instituciones y controles al nuevo gobierno de la élite capitalista intentándose algunos cambios fundamentales que finalmente resultaron fallidos:

1.- Se generó un cambio en el sistema de gobernabilidad en el mundo sustentado en la forma de funcionar de la ‘guerra fría’ en un mundo bipolar de enfrentamiento entre la ideología capitalista y la comunista, así como la división del mundo en tres categorías de acuerdo a su nivel económico.(primero, segundo y tercer mundo)

2.- Aumentaron las rivalidades estratégicas e ideológicas que se desplazaron del ámbito geopolítico al geoeconómico, propiciando que algunas regiones de la región del Asia-Pacífico cambiaran en forma tajante su nivel de importancia al aparecer el nuevo triunvirato mundial de China, Rusia y los Estados Unidos que sustituía al mundo bipolar.

3.- Se generó un déficit de autoridad mundial y los Estados Unidos ya no pudo imponer al mundo su gran poder militar, además de que perdió su hegemonía económica debido a su mal manejo del ‘negocio de la guerra’ y a la caída del dólar – ocasionado por el déficit que causó en el Departamento del Tesoro – cuando era la principal moneda de cambio en el mundo.

4.- Predominó el capital especulativo sobre el financiero y se aplicó una política de ‘bloques regionales’ donde las naciones fueron perdiendo su identidad y su protagonismo económico en la esfera mundial. Como fueron los casos de la Unión Europea, donde se arruinaron Grecia e Irlanda, del Tratado del Libre Comercio en América del Norte donde desaparecieron virtualmente México y Canadá, de la Sociedad de Países en Centro, Sur América y en el Caribe, donde la mayoría de las naciones de menor importancia económica dejaron de interactuar en el mundo global.

5.- Las grandes empresas multinacionales y trasnacionales empezaron a operar como factores de gran poder global, capaces de imponer reglas a las naciones del mundo. Crecieron y se independizaron a tal grado que 52 de las más grande economías del mundo ya no son naciones, sino grandes corporaciones empresariales.

6.- En los últimos 30 años de aplicación de la doctrina neoliberal se han duplicado las cifras de personas viviendo en condiciones de pobreza extrema y ya se acercan a la cifra de 1,500 millones, casi una cuarta parte del total de la población mundial.

7.- El control y la regularización del mercado mundial quedó en manos de la pequeña élite mundial capitalista que aún no sabe como actuará.

Por fortuna, al margen de ese poder decadente del neoliberalismo se va generando una reorganización del ‘orden mundial’ con la integración de la India a la Organización de Cooperación Shanghái (OCS), durante la cumbre realizada en Dushanbe, la capital de Tayikistán los días 11 y 12 del pasado mes de septiembre. Aunque la OCS fue creada por Rusia, China, Kazajistán, Tayikistán y Uzbekistán para garantizar la seguridad regional y combatir el terrorismo, el separatismo y el extremismo, en el futuro podrán unirse Irán y Pakistán, una vez que esta última nación resuelva sus problemas fronterizos con la India. En los hechos, la creación de la OCS es un desafío a liderazgo de los Estados Unidos en una región donde cada vez tiene menos control y ahora es China la que manda, mientras se fortalece la alianza de China y Rusia con el acuerdo del gasoducto para proveer de gas ruso a Pekín, mientras Washington se revuelve en una honda preocupación.

El Nuevo Orden Mundial se rediseña aún más después de la visita del Xi, el máximo líder político de China a la India, donde se firmaron doce importantes acuerdo entre Modi, el nuevo líder político de la India y Xi, en los que se acordaron desde las inversiones y el comercio hasta la cooperación para producir energía nuclear. Esta alianza desafía las supuestas diferencias ideológicas entre las dos grandes naciones y se basa en las necesidades geopolíticas de potencias que enfrentan problemas y enemigos comunes. Al tomar Modi el poder en la India, después de vencer al ex primer ministro Manmohan Singh se le reconoce como una fuerza progresista heredera de la Familia Gandhi y de Nehru, aliada tanto con socialdemócratas como comunistas. Modi está mostrando una profunda comprensión de las tendencias históricas en este período del sistema global y de la política del continente asiático. Al grado de que hace unos días realizó un ejercicio antiterrorista de corte internacional en el interior de Mongolia, donde participaron China y los demás países de la región.

Parece ser que la OCS ha sido la respuesta de Asia a la presencia bélica desestabilizadora de los Estados Unidos en esa región, mientras que la denominada Ruta de la Seda es la respuesta económica al cerco que pretende imponer sobre China la administración de Obama. Y por si fuera poco, ahora mismo se ha firmado la alianza de China y de Rusia con Europa representada por Alemania. La Nueva Ruta de la Seda une a la ciudad industrial china de Chongqing con Duesburgo en Alemania, atravesando Kazajistán, Rusia y Bielorrusia, evitando las zonas más conflictivas al sur del Mar Caspio como Afganistán, Irán y Turquía. Esta ruta comercial está destinada a ser la de mayor capacidad en el mundo recortando el tiempo actual de transportación marítima de 35 a 15 días, por lo que se prevé que China se convierta en el principal socio comercial de Alemania, cambiando por completo toda la geopolítica actual.

Adenda: Toda esta información del gran cambio geopolítico que se genera en Asia está disponible en Internet en todos los idiomas, aunque por razones comprensibles, los Estados Unidos y los países que aún están bajo su control, como es el caso de México se rehúsan a aceptar esta nueva realidad que ahora mismo está actuando.