Dice el eminente sociólogo William Davis que el dinero abandonó sus fortalezas industriales del norte de Inglaterra y el medio oeste de los Estados Unidos. Con la ayuda del Estado se fue hacia los distritos financieros y de negocios de las ciudades globales como Londres y Nueva York. Cuarenta años después es thatcherismo sigue marcando la política económica global.
Después de la crisis financiera del 2008 no cambió la ortodoxia política y la cosmovisión del libre mercado se hizo más dominante en Estados Unidos, Asia y Europa. Cuando la pandemia pensaba que el mundo se haría más flexible y nos llevaría a formas más humanistas o más salvajes del capitalismo.
Dice Davis que en lugar de ver esto como una crisis del capitalismo se podría entender como un evento mundial que permite nuevas visiones económicas e intelectuales.
Con la pandemia se va a medir si en el combate del virus fue más efectivo el autoritarismo chino o la supuesta democracia occidental. Parece que China va a salir fortalecida con la pandemia iniciada en su territorio y con su sistema de gobierno.