A raíz de los grandes problemas que ahora mismo enfrenta México con una sociedad indignada y enfurecida por los actos de barbarie que están sucediendo en grandes sectores de la sociedad mexicana de bajos recursos y de quiénes viven en pobreza extrema, me propongo enumerar algunas ideas que a manera de reformas políticas constitucionales, reglamentos y propuestas en general pudieran ser de gran utilidad en este momento en el que todas las naciones avanzadas del mundo consideran que nuestro País se encuentra muy cerca de un estallido social que podría derrumbar por completo toda la estructura del Estado, generando una etapa involutiva de dimensiones impredecibles tanto en el aspecto político como en el económico y social.
El origen de este fenómeno social y político ha sido el establecimiento de un control total del Gobierno de los Estados Unidos sobre la vida interna de México desde 1982 que ha llegado a su límite después de que durante varias décadas estuvieron explotando los recursos naturales, minerales, petroleros, marítimos y de todos los géneros, mientras unos cuantos monopolios se quedaron con el control de las principales fuentes alimenticias de la población y se posesionaron no solo de las principales tierras agropecuarias y el subsuelo, sino que destruyeron la mano de obra rural y se apropiaron de las principales fuentes acuíferas y energéticas.
Otro tanto ocurrió en el campo de los medios de comunicación masiva y un par de monopolios televisivos lograron el control total de la principal fuente de información política, cultural y social en el País imponiendo una visión del mundo donde una pequeña élite de multimillonarios debe regir los destinos del mundo. Al mismo tiempo, ese duopolio masmediático encabezado por la corporación multinacional de ‘Televisa’ se asoció con una pequeña élite de empresarios y las autoridades de Washington creando una ‘poliaraquía’ mediante la cual han determinado durante tres décadas a los personajes que han encabezado el poder político de México imponiéndoles su particular visión del mundo en todos los aspectos de la vida en sociedad y de la vida doméstica.
Al perder su condición de líderes mundiales, la poliarquía estadounidense se derrumbó, no solamente en México, sino en la gran mayoría de sus colonias y naciones subsidiarias, en Latinoamérica, en Europa, el Medio Oriente, la región del Gran Medio Oriente con el Norte de Africa y la Península Arábiga, el Pacífico Norte y el Sudeste Asiático, mientras se construye un nuevo orden mundial. Por lo que el derrumbe del sistema político mexicano no es un fenómeno aislado, sino que forma parte de una reconstrucción del nuevo orden político que se alinea con el nuevo eje político mundial de China, Rusia, la India y Alemania.
Considerando el gran peligro de un estallido social en México en estos momentos críticos he sugerido a quiénes comparten esta inquietud y aman a México una serie de ideas políticas y económicas viables que pudieran mejorar la situación del País y conducirlo hacia mejores caminos de convivencia social en condiciones de paz.
1.- Regresar a los cuarteles a los elementos del Ejército y de la Marina que fueron llevados a la calle desde el 2006 por instrucciones de Washington a través del presidente Calderón, para realizar actividades policiales y de inteligencia en la creciente economía criminal, aunque su personal carecía y carece hasta ahora de la capacitación adecuada y ha fracasado por completo.
2.- Crear un organismo nacional de seguridad pública e inteligencia que no dependa de Washington, ni esté controlado por algún partido político u organismo privado para combatir el grave riesgo de los carteles del crimen organizado, tal como existe en todas las naciones autónomas del mundo.
4.- Desaparecer por completo o disminuir en alto grado las aportaciones del Gobierno Federal para la operación de los partidos políticos existentes, con el propósito de eliminar a las numerosas generaciones de familias que viven a base de realizar actos corruptos en la función publica que por lo general quedan impunes.
5.- Realizar todos los procesos electorales por la vía digital eliminando al costoso organismo centralizado electoral existente (INE) y otorgando el control de la votación a una empresa internacional de prestigio que se iría cambiando conforme a la programación de los procesos electorales.
6.- Desaparecer por completo o disminuir en forma considerable los salarios y prestaciones de los legisladores y de quiénes los asesoran en sus respectivas Cámaras.(Existen naciones muy avanzadas del mundo que siguen ese criterio con éxito)
7.- Crear una legislación para reglamentar la definición y manejo de la deuda pública a todos los niveles y cuya violación sea considerada como un delito de orden criminal.
8.- Reglamentar el pago de impuestos para las grandes corporaciones y evitar los procesos de consolidación fiscal y demás procedimientos legales para diferir, disminuir o evitar el pago de impuestos. Ahora mismo este sector paga menos impuestos que los asalariados del más bajo nivel de ingresos.
8.- Crear un organismo nacional de expertos en la producción de ‘gas shale’ que conozca todos los riesgos mortales para la población que dejan sus aguas y gases residuales. Basta con que el Gobierno mexicano consulte los últimos reportes de la Agencia Nacional de Energía de los Estados Unidos (INE) para conocer el error en el que está incurriendo al abrir esa explotación en forma intensiva a empresas privadas nacionales y extranjeras.
9.- Crear organismos nacionales de expertos en diversas ramas de la investigación, la ciencia y la tecnología para que coadyuven en las diversas operaciones del Gobierno, sin que formen parte de él. Solo señalaré unos cuantos sectores científicos y tecnológicos que en la actualidad no están dirigidos por expertos, sino por funcionarios públicos sin formación científica especializada en actividades como la explotación y conservación de fuentes acuíferas, además del re-uso de las aguas residuales; la construcción de obras hidráulicas, ductos, puentes y carreteras con materiales 100% impermeables; la generación de energía eléctrica, nuclear, eólica y otras fuentes limpias; los controles ecológicos, urbanos y rurales; los servicios de salud y de salubridad, el control de endemias y la infinidad de servicios públicos cuyos operadores carecen de fundamentos científicos o tecnológicos. Con el uso social de la ciencia, los costos para el erario público pueden ser disminuidos substancialmente en beneficio de todos los mexicanos.
10.- Una fuente de ingresos inmediatos y sin costos para el erario nacional sería la creación de un organismo de expertos en las riquezas artísticas que conserva México desde su primer etapa mesoamericana de los olmecas y los teotihuacanos, pasando por la Gran Tenotchitlán y las maravillas que dejó la Colonia en el Centro y Sur de México que constituyen el ‘patrimonio de la humanidad’ más numeroso e importante del mundo. Publicando a nivel mundial el resumen de estos nuevos estudios el turismo hacia México podría multiplicarse rapidamente y con ello la infinidad de empleos para las clases populares que genera el turismo.
Adenda: El breve análisis anterior lo realicé a raíz de una invitación de Cuauhtémoc Cárdenas a Lucas de la Garza y a un servidor para que asistiéramos a un ‘petit comite’ para dar algunas ideas con relación a la grave crisis que vive el País en estos momentos. En los hechos el proyectado evento se convirtió en una faraónica sesión de admiradores, aduladores y enemigos del Ingeniero Cárdenas cuyo propósito real aún no logro entender.