Un estudio separado del Banco Mundial en octubre pasado encontró que la pandemia podía empujar hasta 60 millones de personas a la pobreza extrema. Dice Bucker que para luchar contra la desigualdad, los gobiernos deben asegurarse de que todos tengan acceso a la vacuna y apoyo financiero de Covid-19 si pierden su empleo. Es el momento de que las inversiones a más largo plazo en los sectores de servicios públicos y de energéticos crean millones de puestos de trabajo y garanticen que todos tengan acceso a la educación, la atención a la salud y la atención social.
En los Estados Unidos, Oxfam instó al Congreso a aprobar un plan de recuperación económica que invirtiera en empleos verdes y apoye a la industria del cuidado infantil que ayudará a las mujeres a volver al trabajo y a proporcionar más ayuda a la lucha mundial contra la pandemia.
Dijo Bucher que estas medidas deben ser la base de una ‘nueva normalidad’ en la economía que funciona en beneficio de todas las personas, no solo de los pocos privilegiados.
Por su parte, el presidente Biden propuso un paquete de coronavirus y ayuda económica de 1.9 billones de dólares que contiene pagos adicionales de estímulo, beneficios de desempleo, asistencia nutricional y de vivienda. Este plan de recuperación económica viene el mes que entra.