En febrero de 2017, Trump firmó una medida que desechaba una regulación de Obama destinada a mantener las armas lejos de personas con enfermedades mentales graves. Globalmente, las leyes restrictivas para armas de fuego han demostrado una gran diferencia a la hora de frenar las masacres. En Australia ocurrieron 4 tiroteos masivos entre 1987 y 1996. La opinión pública se volvió contra la propiedad de armas y el Parlamento aprobó leyes de armas más estrictas. Desde entonces, Australia no ha vuelto a tener un tiroteo masivo.
Estados Unidos tiene una de las tasas mas altas de muertes por armas de fuego entre los países desarrollados según datos de la OMS. Y según datos de la OCDE de 2010, los estadounidenses tienen 51 veces más posibilidades de morir por disparos que las personas de Gran Bretaña.
Aunque la mayoría de los estadounidenses dicen que poseen armas para su protección personal, según Pew Research, la mayoría de las muertes por armas de fuego son causadas por autolesión. De hecho, los suicidios relacionados con armas de fuego son 8 veces más altos en Estados Unidos que en otras naciones de altos ingresos.
Sin embargo, a nivel mundial Estados Unidos registra menos asesinatos con armas de fuego que muchos otros de sus vecinos del sur.