Según los críticos sociales independientes, Facebook ha ayudado a aumentar la desinformación sobre el coronavirus, las elecciones, la represión política y la incitación a la violencia real. Estos críticos han advertido durante mucho tiempo sobre la propagación de la desinformación del presidente Trump en cuya compañía han encontrado su espacio los supremacistas blancos y todos los grupos de odio.
El Sr. Zuckerberg, director general de Facebook ha permitido que las publicaciones que lanzan intolerancia y mentiras permanezcan en Facebook en nombre de la libertad de expresión. Desafortunadamente, el enfoque de Facebook sobre los derechos humanos sigue siendo muy reaccionario y fragmentario.
Actualmente Facebook está sujeto a una auditoría sobre derechos civiles y discursos sobre el odio y la supresión de votantes que fue suspendida por Zuckerberg.
Muchos en la comunidad de derechos civiles se han desanimado, frustrado y enojado, después de años de compromiso en los que imploraron a las empresas a que promovieran la igualdad y a luchar contra la discriminación, así como a cuidar la libertad de expresión.