La Edad Media se inicia en el año 476 DC y termina con la invasión de Constantinopla por los turcos en el 1453 DC. Es entonces que aparece el feudalismo y surge el feudo como la forma básica de organización política y social que coincide luego con la fusión de las dos culturas que convivieron en el Impero Romano de Occidente: la románica y la germánica.
En esa época la vida material se basaba en el trabajo del siervo y ahí se sustentaba la estructura política social y económica de esa era. La tierra era la fuente de toda la riqueza y pertenecía al señor feudal que no solo podía explotarla, sino que tenía el dominio sobre los hombres que la trabajaban. El siervo era parte de la propiedad de la tierra y debía respeto y sumisión al señor feudal, quién además ejercía muchas funciones políticas expidiendo leyes, haciéndolas cumplir, impartiendo justicia entre sus vasallos, acuñando moneda e imponiendo derechos de peaje y de comercio.
La sociedad feudal se dividía en el sector superior donde estaba el Rey, los señores feudales, los nobles ricos y el alto clero (incluido el Papa) y en segundo lugar estaban el ‘bajo clero’ y los villanos. Esta Edad Moderna comprende del 1453 DC hasta el 1789 DC cuando se inició la Revolución Francesa. Se inicia esta época con el ‘Absolutismo’ cuando nacieron los Estados nacionales europeos hacia fines del siglo 15 y se prolongó por más de 200 años. En la declaración ‘el Estado soy yo’ del rey Luis XIV (1643 – 1715) expresa con precisión el concepto del derecho divino de los reyes. Aunque luego se iniciaron una serie de revoluciones en Inglaterra que fueron forzando a los monarcas a entregar su poder a los parlamentarios.
La Edad Contemporánea fue desde 1789 hasta los tiempos actuales anteriores al surgimiento de la ‘época digital’, la cual se podría ubicar en la primera década del siglo 21, cuando los megamillonarios se apoderaron de la Banca Central de todo el mundo y empezaron a controlar todo el dinero circulante en el mundo. Esta Edad consta de la Revolución Industrial, donde predominó la burguesía, así como de la industrialización y los movimientos de obreros y proletarios. Contiene las dos Grandes Guerras Mundiales, la Guerra Fría, la Guerra Espacial Armamentista, la Globalización y ahora mismo la Revolución Digital.
Entre 1870 y 1914 existe un período de mejoramiento de las relaciones y la comunicación entre los países de Occidente, mediante Congresos, Exposiciones Universales de toda índole y el renacimiento de las Olimpíadas buscando la unidad mundial en el deporte. Eso no evitó que existiera un clima de desconfianza entre las naciones que llevó a varios países a invertir sus capitales en la compra de armas, no tanto para combatir, sino como para infundir respeto frente a los demás países.
Hacia fines de ese período surge un gran desacuerdo entre Rusia y la Gran Bretaña, quiénes buscaban dominar a todo el mundo en esa época. Luego apareció Alemania y declaró la guerra tanto a Rusia como a la Gran Bretaña. Al mismo tiempo se iniciaron los conflictos entre Asia y Africa. Entre 1914 y 2011, el mundo entero está marcado por los conflictos bélicos de las dos Grandes Guerras Mundiales y posteriormente por la ‘Guerra Fría’ que originaron la destrucción del equilibrio del Planeta y causaron la muerte de millones de seres inocentes en todo el mundo. Acentuándose este injusto crimen en las naciones pobres y subdesarrolladas.
Fue hasta entonces que se crearon las instituciones supranacionales, encabezadas por la Sociedad de las Naciones Unidas (ONU) y casi al mismo tiempo caía el grupo de naciones que integraba a la Unión Soviética surgiendo una nueva relación comercial y diplomática entre ellas y los demás vecinos europeos. Luego viene la revolución tecnológica aportando más beneficios que perjuicios para la humanidad en general. Mientras ahora mismo culmina con una nueva forma de comunicación entre los seres humanos de todas las etnias y lenguajes del mundo en una etapa de la historia que se conocerá como ‘era digital’ generando nuevos paradigmas no materiales e incrementando el nivel de paz y de alegría entre todos los seres humanos.
Lo maravilloso de la nueva ‘era digital’ es que no solo facilitará las relaciones entre las distintas naciones del mundo, sino que atenuará en alto grado los conflictos raciales, las diferencias originadas por la radicalización de conceptos religiosos, de mitologías específicas y de diferentes visiones políticas o jurídicas del Estado. Asimismo servirá para aminorar la intensidad de las emociones, de las conductas y de las vivencias del ser humano permitiéndole una vida doméstica más sencilla y un mejor desempeño como miembro de un grupo familiar o social determinado.
Es muy probable que surjan nuevas formas de experimentar la vida en parejas sin matrimonio, que se descubra la maravillosa experiencia de la ‘solitud’, así como de nuevas formas de expresar el amor, la solidaridad hacia otras personas que no sean del núcleo familiar y se abran nuevas cualidades organolépticas y neuronales que le permitan al ser humano ‘digital’ disfrutar de nuevas expresiones del arte y de la alegría que no había percibido en el mundo analógico.
Adenda: Este pequeño proyecto de análisis de la historia de la civilización humana solo hace una reflexión muy simple de lo que ha sucedido en la historia, cuando se llevan a cabos cambios profundos en las formas de comunicación y con la creación de nuevas tecnologías. La fecha exacta del nacimiento de la ‘era digital’ es aún difícil de establecer, pero yo he pensado que podría ser el año del 2008, cuando la pequeña élite megamillonaria se apoderó de la mayor parte del dinero circulante del mundo mediante el uso de una señal digital enviada a la Banca Central estadounidense para cancelar los créditos de dinero especulativo cuando aun era la más poderosa del mundo. Aunque aún falta saber como responderá la Banca de China, cuando alemanes y japoneses se han quedado callados.