En el segundo trimestre del año el PIB creció el 1.6 % según el Departamento de Comercio que anualizado fue de 6.5 %. Esto llevó a la producción de vuelta su nivel prepandémico. Después de la última recesión que terminó en 2009, el PIB tardó dos años en repuntar por completo y ahora lo ha hecho mucho más rápido.
La producción está muy por debajo del crecimiento prepandémico y Estados Unidos tiene casi 7 millones de empleos menos que antes de la pandemia. La tasa de desempleo de trabajadores negros fue de 9.2% en junio.
Las buenas noticias es que todo ocurre mucho más rápido que después de la última crisis financiera. El crecimiento podría haber sido más fuerte si no hubieran surgido problemas laborales y muchas tiendas cerraran que combinadas con una avalancha de demanda de los consumidores causaron una inflación muy rápida y la producción económica aumentó 3.1%.
Ahora está surgiendo una nueva amenaza causada por la contagiosa variante Delta del coronavirus que provocó un fuerte aumento de casos en todo el país y disposiciones de los gobernantes para restringir la movilidad de las personas.