El Orden Mundial en 2019 (I)

Según los principales analistas de la política mundial, el año 2019 no será de cambios radicales, sino que las principales tendencias de los últimos años seguirán condicionando el rumbo en este año y serán puestos a prueba. Dichas dinámicas se pueden reducir a tres puntos: la competencia entre China y los Estados Unidos, la consolidación de un escenario multipolar y el auge del populismo nacionalista.

La competencia de China y los Estados Unidos ha sido principalmente en el ámbito comercial, pero se espera que en el 2019 dicha competencia se traslade al plano tecnológico, en áreas como el desarrollo de la tecnología 5G o la carrera espacial. Otro aspecto de esta competencia es el proceso de paz con Corea, que no se solucionará mientras que China y Estados Unidos sigan en pugna. Lo más peligroso sería que la tensión entre los dos gigantes se manifieste en el ámbito de China Meridional o en el estrecho de Taiwán.

El mundo dominado por una sola potencia se moverá hacia un escenario multipolar, ya que Rusia pretende unirse a Estados Unidos y a China en el liderazgo mundial. Además de esos tres grandes actores hay potencias menores como Arabia Saudita e Irán, más otras como Japón, Catar y Etiopía.

Se pronostica que el populismo nacionalista ya se estableció como fenómeno mundial y en el 2019 se pondrá a prueba. En América Latina, López Obrador en México y Bolsonaro en Brasil inician sus posicionamientos con ideologías opuestas pero con formas de populismo similares. Reino Unido enfrenta el Brexit y Bruselas está asustada ante el probable auge de la ultraderecha en las elecciones europeas y teme la crisis que puede venir de Italia. También estarán a prueba en las urnas Mode y Netanyahu, mientras que Estados Unidos acabará inmerso en el proceso electoral presidencial del 2020.

Por otra parte, Europa afronta un año crucial en el que se discutirá la idea misma de la Unión Europea, donde destacan: 1.- La consolidación de la derecha en las elecciones europeas de mayo y en diversas elecciones nacionales y regionales. 2.- Existe un camino incierto en el ‘brexit’. 3.- Se debate el eje francés-alemán ante los retos que podrían plantear Italia o los países del Este.

Además de que Rusia sigue tratando de demostrar que es otra vez la potencia que fue, aunque sea a costa de un alto precio interno, por lo que conviene vigilar todas estas tendencias:

1.- Aumento de la tensión entre Rusia y Occidente, con frentes abiertos en Ucrania, el Báltico o la mesa de negociaciones del Acuerdo Nuclear INF. 2.- El Kremlin tiene que lidiar con el estancamiento económico de Rusia y el creciente descontento de la población. 3.- La ambición de consolidarse como actor de primer orden en Oriente Próximo y en Asia.

Adenda: En el siguiente capítulo pasaremos a analizar una síntesis de los pronósticos geopolíticos para Oriente Próximo y Magreb.