Para los países ricos como Estados Unidos, Reino Unido y los de Europa continental, el panorama es menos optimista. Sus economías se estancaron en el 2020 debido a la pandemia y a los confinamientos. Por lo que se espera que estas economías sean un 5% más pequeñas que en el 2020.
Sin embargo, es probable que los mayores perdedores del 2021 sean los países en desarrollo, ya que no tienen recursos para adquirir suficientes vacunas y controlar sus sistemas de salud pública. Incluso países de rápido crecimiento como Brasil, India y Sudáfrica enfrentan tiempos difíciles.
Antes estos países tenían una clase media en crecimiento y ahora millones de trabajadores pobres se verán obligados a regresar a sus aldeas y a sus barrios marginales urbanos y se enfrentarán a la pobreza masiva e incluso a las personas que viven en pobreza extrema.