Desde la perspectiva de la psicología la pasión se define como una fuerte inclinación hacia una actividad que gusta a la persona, en la que invierte tiempo y energía. Existen dos tipos de pasión y cada una de ellas está asociada con diferentes resultados y experiencias. La pasión armoniosa se origina en una introspección autónoma de la actividad para identificar y guiar a las personas a comprometerse con la actividad que ellos más aman.
Por otra parte existe la pasión obsesiva que también proviene de un proceso introspectivo y conduce a la gente a experimentar una urgencia incontrolable para comprometerse en una determinada actividad. Como resultado de diversos estudios con gran variedad de participantes, actividades y resultados se encontraron finalmente expertos para esta área de conocimientos.
El estudio de la pasión se desarrolló con investigaciones científicas que soportan con claridad el importante rol de la pasión en la vida del hombre. El psicólogo cognitivo de la Universidad de Quebec en Montreal, Robert J. Vallerand, quién es el jefe del Laboratorio de Investigación sobre el Comportamiento Social propone que el concepto de ‘pasión’ sea considerado como un factor psicológico. Uno de los tipos de pasión es por la actividad que realiza la persona y puede tener diferentes consecuencias en la cognición, el afecto, la conducta las relaciones y el comportamiento. Cuando Vallerand inició su investigación a fines de 1990, casi nadie veía la pasión desde una perspectiva psicológica, mientras que generaba mucha atención de los filósofos y sólo recibía atención empírica de los psicólogos.
Otra visión de la pasión, tan importante como la de Vallerand son los estudios de Barry Kaufman, un psicólogo cognitivo cuyos trabajos pueden encontrarse en publicaciones como Psycology Today, Harvard Business Review online y Scientific American, tanto como en el Web site, Creativity post.com. En sus escritos, Kaufman discute el papel de la pasión en cualquier clase de actividades creativas, ya sea cuando se está formando una familia o se está terminando un trabajo doctoral. Kaufman, quién tiene un doctorado en psicología de Yale y enseña en Nueva York, no sólo está interesado en el contexto sano de creatividad y pasión, sino que no se asusta de discutir como un deseo intenso de alcanzar una meta puede ser perjudicial para la salud de alguien que está en un ambiente de alta competitividad produciéndole una tensión extrema denominada ‘pasión obsesiva’.
Para Kaufman existe una gran diferencia entre la pasión perjudicial y la productiva pero es posible desviar la negativa y conducirla a la que es armoniosa. Dice Kaufman que la pasión es la energía que puede impulsar un proyecto o una tarea y tiene un rol similar al de la inspiración. Cuando nos comprometemos en algo estamos apasionados con ello y nos sentimos comprometidos con ese asunto. Las investigaciones demuestran que el flujo de la actividad se relaciona directamente con la pasión.
Los psicólogos han estado estudiando por años la pasión, pero solo recientemente la han logrado conceptualizar. El ser humano entiende muy diferentes condiciones de pasión y algunas veces se encuentran elementos negativos que son conocidos como obsesión. Vallerand ha realizado la mayor parte de sus investigaciones para distinguir la pasión obsesiva de la armoniosa.
De modo que existen dos diferentes tipos de pasiones, pero la gente no distingue la diferencia sino que solo se siente apasionada. Tanto con la pasión obsesiva como con la armoniosa, la persona se siente inmersa en su trabajo de manera intensa. Pero el sentimiento de poder concentrarse con el trabajo se relaciona más con la pasión armoniosa que con la obsesiva, ya que la persona que experimenta la pasión armoniosa se siente más motivada desde su interior.
Dice Kaufman que algunas personas con pasión obsesiva creen que la única forma de ser productivos es yendo siempre al extremo. Tienden a pensar que son muy trabajadores y que siempre ponen lo mejor de sí mismos. Y existen muchos gerentes de empresas que piensan que son ellos la clase trabajadora que deben contratar.
Ellos realizan esta investigación pidiéndole a los empleados que estudien el número de horas que están en el trabajo y como se sienten con él. Es probable que tanto las personas obsesivas como las armoniosas puedan creer que están el mismo tiempo en el trabajo, pero quiénes son apasionados armoniosos son mejores en lo que realizan.
A veces las personas requieren de ayuda para encontrar sus pasiones, ya que en ello existe una paradoja, debido a que cuanto más se trata de forzar la pasión es menos probable que se descubra. No existe magia alguna para vivir en la pasión, aunque mucha gente cree no tener tiempo para la autorreflexión y sobre cuáles son sus razones para buscar la pasión y solo de vez en cuando llega a tener un monólogo interno.
También puede ser útil pensar en la búsqueda de un ambiente adecuado para que la persona encuentre sus inclinaciones más genuinas, pero hay que saber que dentro de la pasión nada se puede controlar, por lo que cuando la persona cree estar controlando su proceso pasional es porque ya está involucrada en la pasión armoniosa.
Adenda: He abordado este tema tan abstracto de la pasión y de la actitud de las personas porque la sociedad humana entera está ahora mismo cambiando sus mitos y sus paradigmas. Por lo que conviene conocer el análisis científico de lo que sucede al interior de nuestras mentes de la manera más objetiva posible y así escoger con acierto nuestros nuevos paradigmas.