Con motivo del caos mundial existente en el actual período de la historia, dónde se ha acentuado en forma notoria la decadencia de Occidente, intentaré analizar y cuestionar la absurda visión del mundo propagada a partir de la Segunda Guerra Mundial. El cuál es un modelo de desarrollo de modernidad y progreso que supone no existen ni han existido otras alternativas. El cual fue impuesto por quiénes aún detentan o creen detentar el poder en todo el mundo.
Lo primero y más conveniente es tratar de comprender lo que es un mito. Ya que los miembros integrantes de un determinado grupo social requieren llegar a acuerdos generales para que sea posible el desenvolvimiento individual y colectivo. La vida en sociedad implica entrar en acuerdos, lograr consensos, compartir, ceder o imponerse. Para ello es necesario un lenguaje que permita la comunicación, las relaciones y los intercambios con otros grupos sociales y entre ellos mismos. Se requiere compartir conceptos sobre las cosas, sobre los eventos y sobre sus causas y orígenes.
Decía Jacopin en el 2002 que el lenguaje suele ser considerado de modo utilitario, como si por sí mismo no fuese capaz de crear diferentes tipos de realidades. Pero no solo sirve para establecer relaciones sociales, sino para darles todo tipo de formas. La globalización actual recrea los métodos ancestrales de reducción social para lograr el consenso e imponerse, manteniendo el control sobre las relaciones humanas y sociales, los modos de intercambio y los tipos de gobiernos. Por lo que se puede decir que uno de los roles de los medios masivos de información es el de reducir la sociedad a un pequeño grupo homogéneo capaz de compartir los mitos necesarios para mantener un determinado orden establecido.
La palabra ‘mitología’ viene del griego ‘mythos’ que significa palabra no racional, discurso o ficción. Ese término fue asimilado por el latín ‘mythos’ que significa fábula, cuento o historia. ‘Logía’ proviene del griego ‘logos’ que significa razón o conocimiento. Por lo que mito – según Leví Strauss -es una explicación dogmática de hechos, sucesos, fenómenos y concepciones del mundo que son indispensables para quiénes pretenden explicar lo que desconocen. De modo que el mito es una respuesta a las preguntas que fundaron la coherencia mental de un grupo. Y la vigencia del mito garantiza dicha coherencia.
Esta forma de buscar respuestas para tratar de explicar lo que sucede y como sucede ha tomado formas muy variadas y en algunos casos hasta fantásticas hacia el interior de cada grupo humano. Ya que funciona como respuesta al temor que vuelve vulnerables a los miembros de un determinado grupo social.
Dice Lévi-Strauss que aun cuando la mitología no corresponda a una realidad objetiva eso carece de importancia. Debido a que la gente forma parte de un grupo social que cree en esa misma mitología. Por lo que lo importante de un mito no es que sea falso o verdadero, sino que exista un acuerdo tácito entre las personas que comparten el mito.
El mito será usado siempre que un grupo social pretenda establecer acuerdos que permitan mantener su vigencia y cohesión sin auto cuestionamiento ni búsqueda de razones profundas en la forma de percibir o de vivir la realidad. Ya que la única forma de desarrollar las posibilidades del ser humano es aceptando sus propias limitaciones para luego comprenderlas y poder evolucionar. Un intercambio de comprensión mutua es muy complicado, por lo que el uso de los mitos ha sido totalmente indispensable a través de la historia de la civilización humana.
Parece factible la creencia en un mito hacia el interior de un grupo social determinado, puesto que las críticas provenientes del exterior no afectan el funcionamiento interior del grupo. Aunque la mayoría de los intelectuales y los científicos de la actualidad afirman que el mito no tiene cabida frente a la realidad de hoy en día, debido a que el acceso al mundo y a lo que sucede en él es el mismo en todos los casos y es el resultado de una educación institucional obligatoria que enseña lo mismo a todos, además de la influencia de los medios de comunicación y de las tecnologías actuales que son similares para todos los que viven en Occidente.
Dice Lévi-Strauss que quizá algún día lleguemos a descubrir que la lógica que apoya al pensamiento mítico sea la misma que apoya al pensamiento científico, ya que el lugar donde se ha desarrollado la idea mítica del progreso no fue la conciencia, sino el mismo mundo físico. En el cuál una humanidad dotada de facultades constantes se habrá encontrado en el correr de su larga historia con objetivos diferentes, estableciendo, imponiendo y controlando el orden social a través del uso de los mitos.
Adenda: En la parte II de este ensayo trataré de identificar a los principales mitos que constituyeron la visión del Mundo Occidental desde fines del siglo XVIII y muchos de ellos permanecen vivos, sin que su muerte natural haya sido percibida por la gran mayoría de los pobladores de esta vasta región del mundo que los consideran ‘eternos’.