Según el activista, escritor y actor Lee Camp, el nivel de desigualdad tan alto que existe en los Estados Unidos debería de impedir que su sociedad funcionara. Dice Camp que el 63% de los estadounidenses no podrían enfrentar gastos de emergencia doméstica aunque sólo fuesen de 500 dólares, mientras que existen multimillonarios con fortunas de cientos de miles de millones de dólares.
Con el capital de sólo uno de esos multimillonarios se podría resolver el problema de la hambruna en el mundo entero por muchos años y aún le quedaría más dinero del que requiere para vivir holgadamente el resto de su vida. Sin embargo, así las cosas, no hay mitines en la calle, el sistema inmobiliario, financiero y comercial no está colapsado, sino que todo funciona y todos desean seguir viviendo así.
Según Camp, todo se debe a los mitos que se han vendido desde que nacemos, por lo que son aceptados y nunca cuestionados. Se pregunta Camp que cuando fue la última vez que el Congreso hizo algo que no fuese apoyado por las mayorías de la sociedad y menciona que tanto el Centro Carter como el expresidente Jimmy Carter aseguran que Estados Unidos se ha convertido en una oligarquía con una élite pequeña y corrupta que controla al País sin ninguna participación del pueblo, ya que los gobernantes solo requieren del mito de que ‘somos una democracia’ para darnos la ilusión de que hay control en el Estado. El mito principal es que existe un sistema de votación legítimo y responsable.
A pesar de dicho mito, el Estado funciona con grandes mentiras y desigualdades, ya que existe una amplia variedad de fenómenos electorales, como la manipulación de muchos sectores de votantes, la desaparición de datos sobre los electores, boletas provisionales, supercomités de acción política, dinero sucio y exclusión de partidos menores en los debates. Nada de eso, dice Camp, pertenece a un sistema electoral legítimo.
Otro mito estadounidense que existe es que hay muchos medios independientes que obligan a los gobernantes a rendir cuentas. Camp lo niega, señalando que los medios de comunicación son financiados por contratistas de armas, gigantes farmacéuticos, grandes bancos y grandes petroleras. Los medios corporativos – dice Camp – trabajan para promocionar una guerra, aplaudir a Wall Street y propagar el consumismo.
El Mito # 5 del Poder Judicial Independiente es un arma que también es manejada por el Estado corporativo. Según Camp los banqueros pueden ejecutar hipotecas en millones de hogares de manera legal sin ir a la cárcel, mientras que los medios de los activistas cumplen condenas por ‘desobediencia civil no violenta’. Por su parte, dice el activista Ralph Nader que el sistema judicial de los Estados Unidos ha legalizado leyes secretas, tribunales secretos, pruebas secretas, presupuestos secretos y prisiones secretas en nombre de la seguridad nacional. Según el New York Times, el 97% de los casos federales y el 94% de los casos estatales terminan en acuerdos de culpabilidad y los acusados se declaran culpables a cambio de una sentencia menor.
El Mito #4 de los Estados Unidos se refiere a que la policía nos protege y son nuestros amigos. Dice Camp que la policía de los Estados Unidos está diseñada para dos cosas: proteger la propiedad privada de los ricos y llevar adelante una guerra inmoral contra las drogas que es en realidad una guerra interna, ya que Estados Unidos encarcela a más personas que ninguno otro país en el mundo y es el estado penitenciario más grande del mundo. Al grado de que China y Corea del norte son estados carcelarios de aficionados.
El Mito estadounidense # 3 es el que señala que comprar da la felicidad. Dice Camp que la mayoría de las personas siente ‘un vacío tenaz, una alienación interior por debajo de sus emociones superficiales’. Eso es debido a que la mayoría de los seres humanos despilfarraron sus vidas en empleos que odiaban, para luego ir a esas celdas llamadas casas o apartamentos.
Luego prendemos el televisor para que todo tenga sentido al ver programas de supuesta ‘realidad’ sobre personas que la pasan peor que nosotros y eso nos parece gracioso. Si tenemos suerte, ganaremos en la semana para pagar los fines de semana con cerveza y todo tenga sentido. Aunque eso no sea suficiente satisfacción, los anuncios de la tele dirán que ‘comprar te hará feliz’.
El Mito #2 dice que el estadounidense pasa gran parte de su vida en el trabajo y sin embargo nunca llega a ser feliz, por lo que gasta gran parte de su vida útil haciendo cosas inútiles en lugar de dedicarla a cosas creativas y a tratar de ser feliz en esta vida.
El Mito #1.- Dice Camp que a pesar de que los Estados Unidos es una de las sociedades más desiguales y menos libres del mundo, su mito #1 es de ‘Somos Libres’. Por lo que para demostrarlo con humor negro recomienda algunas acciones simples que comprobarían todo lo contrario:
1.- Encender fuego en un estacionamiento para calentarse en invierno.
2.- Dormir en el coche propio durante varias horas sin ser acosado por la Policía.
3.- Tratar de mantener la privacidad durante una semana sin que haya un solo correo electrónico, una búsqueda por web o cualquier otro intento de localización que no sean recopilados por la NSA o las telecomunicaciones oficiales.
4.- Intente alistarse en el Ejército porque necesita y dinero para la Universidad y luego trate de salirse diciendo que ya no quiere estar ahí.
5.- Preséntese como candidato presidencial de un tercer partido o usar el baño de Starbucks sin comprar nada y siendo de raza negra.
Según Camp, la sociedad de los Estados Unidos es una de las sociedades más desiguales y trabajadoras del Planeta y con más multimillonarios que nunca. Como punto final dice Camp que para hacer funcionar este sistema ilógico e inmoral de los Estados Unidos, los gobernantes corruptos actuales no necesitan pistolas o gases para mantener en movimiento sus mecanismos de explotación.
Solo requieren de unos buenos y sólidos mitos que les permitan engañar a las grandes mayorías de pobres.