El Foro de Davos 2016

A menos de dos semanas de que se publicó el sombrío pronóstico económico del Banco Mundial, el FMI (Fondo Monetario Internacional) señaló que habrá un crecimiento menor en la economía mundial y consideró que todas sus previsiones irían a la baja en la edición del 19 de enero del ‘World Economic Outlook’. Mientras que el FMI cree que la economía mundial tocó piso en el 2015 con el 3% de crecimiento y pasará al 3.4%% en el 2016 y a 3.6% en el 2017.

Existen muchas dudas y pesimismo sobre ese desarrollo de la economía, ya que en el último trimestre del 2015 el FMI redujo los pronósticos en un 0.2% y no lo está considerando en 2016 y 2017. Además de que las principales tendencias de ocupación laboral fueron a la baja en el 2015, aconteció la desaceleración de la economía de China, bajaron los precios del petróleo, de las materias primas y de los commodities en general. Mientras se endurecía gradualmente la política monetaria de los Estados Unidos.

Por lo que –según el FMI – el 2016 estará marcado por enormes desafíos y los gobiernos deben concentrar su atención en la capacidad de recuperación en el corto plazo. Sin perder de vista las prospectivas de crecimiento en el largo plazo, según el jefe economista del Foro de Davos, Maurice Obstfeld.

Por su parte, el reconocido economista del Foro Nouriel Roubini hizo un inquietante comentario el día miércoles 20 de enero cuando se inició el foro: ‘La gente viene aquí para discutir soluciones a largo plazo, pero como sucedió en el 2008, vamos a ser capturados por los problemas de corto plazo. Ya que la gente se hace la misma pregunta de entonces de si estamos al borde de una recesión mundial’.

Desde donde quiera que se mire el horizonte está muy oscuro para los cerca de 3000 representantes de las élites globalizadas. En Europa la crisis del euro se debatirá como en los años anteriores, pero ahora se enfrenta al doble desafío del terrorismo de varios géneros y a una crisis migratoria que no se veía desde la Segunda Guerra Mundial.

Por otra parte, la desaceleración económica de China, sus problemas geopolíticos con el resto del mundo, así como la recesión de las economías emergentes, particularmente la de Rusia y la de Brasil. Razones por las que la canciller alemana Angela Merkel y el presidente francés Hollande se han quedado en sus casas, mientras que los Estados Unidos enviaron al vicepresidente Joe Biden y al Secretario de Estado John Kerry. De modo que existe una situación confusa y pesimista en el Foro que es superior a la del 2008.

La gran mayoría de los expertos en economía del mundo consideran que la crisis geopolítica actual es el mayor riesgo existente, además del desempleo estructural de la mayoría de las economías. Por si fuera poco, aparece por primera vez el problema del medio ambiente en el Foro que significa la adaptación al cambio climático, el control de armas de destrucción masiva y la enorme crisis del agua potable. Y a dichos problemas se agregan los que ocasionan los cambios en los precios de la energía.

En este Foro de Davos existe un fuerte sabor pesimista, similar al que existía en la cumbre del 2009, tras la quiebra de Lehman Brothers. Ya que al presente Foro se le agregan los elementos de la peor economía china de los últimos 25 años, las crisis de deuda en las economías emergentes y la posibilidad de un estancamiento en las economías más avanzadas debido a que los inversionistas globales han retirado más de 4 billones de dólares de los mercados financieros globales en las tres primeras semanas del mes de enero. Y las Bolsas enfrentan una peor etapa de principio de año que la del 2009.

Aunque Schwab, uno de los fundadores de Davos insiste en la defensa del capitalismo con cara humana que da excelentes beneficios para su élite, sigue pensando en generar un nuevo ‘renacimiento humano’ además del apoyo que representan Eric Brinjolfssen y su enorme grupo de ingenieros de la Universidad de Stanford que siguen lanzando elogios infundados a la supuesta ‘nueva revolución industrial’ imaginada por los megaricos de Davos.

El martes 19, antes de iniciar el Foro, decía Noreman Beharavech, del ‘think tank’ financiero IHS que el crecimiento mundial ha estado a la baja desde el año 2000 debido a la caída de la población económicamente activa y a la baja de la productividad. Decía Beharavech que ahora mismo existen en el mundo niveles de endeudamiento que no se veían desde los años treinta por lo que los miembros asistentes al actual Foro son los megamillonarios menos queridos en toda la historia del Foro de Davos.

A pesar de que la mayoría de los multimillonarios del mundo occidental siguen pensando que continuarán en el dominio y control del mundo durante muchos años más es visible que el dominio de los Estados Unidos y de sus socios europeos está llegando a su fin. Mientras que también está a la vista la construcción de un nuevo orden mundial que implica la modificación a fondo del sistema financiero global, del control de armas altamente destructivas y lo más importante de todo que es poder conservar el ‘habitat’ del ser humano que se encuentra en una etapa muy avanzada de auto destrucción.

Adenda: Quiénes pertenecemos a generaciones de los ‘baby boomers’ o anteriores, se nos dificulta mucho aceptar que todos los conocimientos académicos y domésticos adquiridos durante nuestra vida hayan dejado de tener importancia en el mundo actual, donde han desaparecido los conceptos del mundo newtoniano con un universo en equilibrio, los valores humanísticos de la Ilustración, los aciertos del capitalismo y el gran fracaso de las ideologías de izquierda en la gran mayoría de las naciones del mundo.