Cualquier cambio climático en general se produce por pequeños cambios que causan un desequilibrio en todo el sistema climático. El cambio climático actual está causado por el aumento de las temperaturas. Pero también puede haber un cambio climático debido a los descensos bruscos, como ya ocurrió en el pasado.
Los factores externos que influyen en el clima se denominan ‘forzamientos climáticos’ que pueden modificar la cantidad de energía que el sistema recibe del Sol o la energía que pierde la Tierra por emisiones al espacio exterior
Estos forzamientos radiativos son 4: la cantidad de radiación solar en lo alto de la atmósfera, el albedo terrestre, la concentración de gases de efecto invernadero y la concentración de aerosoles, tanto los de procedencia natural, como los que vienen de actividades humanas.
Los paleoclimáticos que estudian el clima y sus cambios en el pasado consideran un rango más amplio de forzamientos climáticos que incluyen las variaciones en los parámetros orbitales de la Tierra, la caída de meteoritos, la circulación termohalina, el fenómeno del Niño, la formación de montañas, de placas tectónicas, el vulcanismo, los cambios biológicos a largo plazo, la evolución de plantas terrestres, etc.
Por otra parte se conocen muchos casos en los que el CO 2 ha jugado un papel de importancia en la historia del clima. Ya que aumentos importantes en la cantidad de CO2 propiciaron el período de la extinción masiva del Pérmico-Triásico con un calentamiento masivo del agua marina que elevó la emisión de metano de los fondos marino y aceleró el calentamiento global hasta el límite, llevando a la Tierra al peor momento que ha padecido.
En cuanto a las causas humanas del cambio climático se sabe que el cambio actual es antropogénico y derivado del efecto invernadero por la emisión de gases CO2 y metano.
La influencia del hombre en el cambio climático comenzó con la desforestación de bosques para obtener tierras de cultivo, aunque ahora la mayor parte de las emisiones de gases proceden de fábricas, medios de transporte, actividades agropecuarias y productos de uso doméstico. Sea como sea, la alta demanda de energía por parte de los países desarrollados es actualmente la causa principal del calentamiento global.