Según la Administración Nacional de la Antártida y el Espacio conocida como la NASA, el nivel del mar está aumentando más rápido que hace 50 años y puede empeorar de un momento a otro. Eso significa que a finales de este siglo el agua podría alcanzar casi un metro sobre la tierra firme.
Para buscar el origen de esta amenaza es necesario ver el calentamiento global originado por el cambio climático que a su vez provoca el aumento del nivel del mar desde tres fuentes de acción diferentes:
1º.- La Dilatación Térmica, ya que al calentarse el agua tiende a dilatarse o sea que los océanos ocupan más espacio.
2º.- El deshielo de los territorios helados de Groenlandia y de la Antártida Occidental se acelera por el calentamiento global. Este proceso se acelera con la filtración de agua dulce en la superficie que actúa como lubricante para las corrientes de hielo y las hace deslizarse más aprisa. O sea que el agua dulce filtrada hasta la base de las placas de hielo las derrite y hace que se deslicen hacia el mar.
3º.- Las grandes formaciones de hielo en forma de glaciares y de ‘casquetes polares’ se derriten sin volver a su forma habitual. Antes se deshacían durante el verano pero recuperaban su estado sólido al volver el invierno. Ahora, a causa del calentamiento global las nevadas son más suaves, los inviernos se retrasan y las primaveras se adelantan, de modo que el hielo ya no se vuelve a unir.
Los efectos del aumento del nivel del mar ya se están notando. En primer lugar, el agua invade cada vez más zonas costeras provocando la erosión del terreno y amenazando campos de cultivo, viviendas o zonas vacacionales. También se producen la inundación de humedales y la contaminación de mantos acuíferos afectando a la flora y fauna de cada lugar y provocando la pérdida de hábitat para peces, pájaros, plantas y muchas otras especies.
Un mar con un nivel más alto provoca temporales, desata tormentas y genera fenómenos atmosféricos de mayor envergadura que se convierten en graves amenazas para las poblaciones que están a su paso. Desde la visión social, la amenaza de la subida del nivel del mar pone a temblar a cientos de millones de personas que viven en comunidades costeras, ya que si el agua sigue subiendo se verán obligadas a abandonar sus hogares y a mudarse a otra zona.
Finalmente, las islas menos altas quedarán devoradas por los océanos dando lugar a la desaparición de grandes territorios e incluso de países enteros.
Adenda: Es lamentable que ante un fenómeno tan claro como es el deshielo en nuestro Planeta, los altos líderes políticos de todo el mundo no se hayan podido poner de acuerdo para tomar acciones que retrasen o eviten esta catástrofe de dimensión apocalíptica.
Es increíble que la pasión del ser humano por las cosas materiales y de corto plazo lo conduzca a la destrucción del género humano, de su hábitat y de todas las maravillosas especies aún existentes.