Es muy probable que esta semana el Senado absuelva a Trump poniéndole fin al impeachment, ya que la tasa de desempleo alcanzó el mínimo en 50 años y el mercado de valores está muy cerca de los máximos históricos.
También es muy probable que la economía norteamericana atraviese las últimas etapas de un ciclo de expansión más larga que nunca. Los consumidores están optimistas y no tienen que preocuparse ni por el empleo ni por la economía.
La absolución política de Trump ocurrirá gracias a su índice de aprobación que cuando menos es del 40% entre todos los votantes y de 90% en el partido republicano. Según Morning Consult, sólo el 21% de los demócratas y el 47% de los independientes consideran lo mismo. Por lo que las opiniones sobre la economía unifican a los republicanos en su apoyo a Trump.
Por otra parte, los republicanos del Senado no pueden atacar a Trump porque saben que es muy vengativo y tratará de que finalicen sus carreras políticas.
En encuestas como la de Democracy Fund Voter se muestra que algunos partidarios de Trump lo respaldarán pase lo que pase por razones culturales y no por la economía. No obstante, dos quintas partes del apoyo a Trump provienen de votantes que consideran que las cosas van muy bien. A algunos de estos votantes ni siquiera les gusta Trump, pero piensan que la reducción de impuestos y la desregulación han sido muy buenas para ellos, los ricos.